Que los días, se van

Libros que están a medio abrir, en una mesa desordenada, una lámpara con una bombilla que parece estar medio apagada, un vaso de ron derramado en folios recien escritos, y pasa el tiempo y admiro como el ron se funde con la tinta de mis versos, y pienso, otra noche más, el por qué de todo lo que nos pasa, si hay algo que lo rige o es solo suerte, si todo es cuestión de estar en el momento adecuado, o equivocado, no lo sé. Surgen tantas dudas, tantas preguntas en un solo instante.. y esta noche me pregunto.. 

¿Dónde quedaron las ganas de sentir?, quizá perdí todo el sentimiento que me quedaba, y no quiero recuperarlos aún, puede, que haya tirado todo el trabajo hecho por la borda, pero aún así, no estoy tan mal, y aveces puede que me sienta feliz así, pero percibo que esa felicidad no es verdadera, no es sincera, sino que es solo una imagen distorsionada de lo que yo de verdad deseo. 

Pero está tan lejos, lo que sueño, lo que deseo, que ya puse punto y aparte, y decidí vivir otro tipo de vida, escapar con otros sentimientos, que solo son el reflejo de la tristeza que una vez sintió mi corazón al ser roto, una y otra vez, sin merecerlo, sin tener culpa alguna. 

Vivir sin pensar en lo que harás mañana, pasear por la calle sin tener algún plan, no tener por qué mirar el reloj, vivir cada momento con una chispa de ilusión..