Verano 2013

Verano 2013, que ganas tenía de que comenzases y ya casi has terminado, agosto, ya está agonizando, ahogándose de frío en una de las últimas noches de verano. 

He esperado demasiado este verano, y la verdad es que ha sido diferente a todos los demás, no he vivido muchos sobresaltos, la tranquilidad y la paz han reinado sobre las noches. Murieron los días de desesperación, de no saber ni siquiera donde meterse, aquel verano de 2012 fue el peor, por eso, y a pesar de que no han sido tres meses de desfase, alcohol, sexo y rock and roll estoy demasiado conforme. Julio cumplió con mis expectativas y agosto fue bipolar, fiesta y responsabilidad, aunque quizá solo hubiese faltado su pelo rubio sobre mi almohada, porque ella siempre será mi pequeña obsesión, una espina que molesta pero que no duele, siempre pensaré que ella y yo somos dos paralelas que un día se quisieron cruzar. 

Septiembre se asoma por el balcón, recuperaciones y un nuevo curso por comenzar. Mejor no esperar nada y dejarse llevar. 

La vida es injusta

Me veo obligado a hacer esta pequeña reflexión, ojalá nunca me hubiese puesto a escribir esto, pero tengo que hacerlo.

La vida es un segundo, un instante que se nos regala sin tan siquiera haberlo pedido. Una milésima, un paso en vano, un tic-tac más en el reloj. Aprovechad esta oportunidad única, muchos se van pronto, sin avisar, sin merecerlo, sin remedio, sin vuelta atrás, y nosotros, atónitos ante la muerte desdichada, entre lágrimas, sin saber qué hacer, sin aún creerlo, impotentes, pensando que es una pesadilla, que mañana sonará el despertador como si fuese otro día normal. Pero nada está escrito, el destino no existe, vive el momento, disfruta de cada instante, nunca se sabrá cual será nuestro final, por desgracia la vida, es así... Injusta

Descansa en paz chico, siempre te recordaremos J.H.