Hace dos años, propusieron una excursión para formar mediadores. Ese cursillo se hacía allí, en el cortijo. No dudé un minuto en ir a orientación y poner mi nombre junto a los demás nombres que no conocía, aún ese papel está todavía allí con mi nombre puesto y el curso, "Ángel Bermejo 4º A". Hace poco entré en el departamento de orientación, y lo vi, el mismo, y le pregunté el orientador que si me lo podía quedar, pero no me dejó cogerlo -.-
Aquel lugar, mágico para mi, dio el sentido que necesitaba mi vida. Hoy con los pies puestos sobre la tierra, hay algo dentro de mi que me pide volver, no se el qué, pero solo piensa en volver allí a ese lugar, con otras ideas y siendo más fuerte. Mi cuerpo necesita volver y dar un pensativo paseo a los alrededores de aquel lugar.
Volveré pronto..
Alcaidesa, siempre.
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